El Institut Català de Finances y Bankinter financian la empresa de Girona con un préstamo de 2,3 millones para adquirir maquinaria industrial de última generación y renovar su planta de Besalú/Beuda. La inversión permitirá al fabricante de papel reaprovechar materiales difíciles de procesar como las cajas de cartón de los pedidos online, un residuo cada vez más frecuente.
La empresa LC Paper ha impulsado una inversión de casi 5 millones de euros para mejorar el proceso de reciclaje de papel en su complejo de Besalú/Beuda con el objetivo de reaprovechar materiales difíciles de procesar como las cajas de cartón, un residuo cada vez más frecuente debido al crecimiento de las compras online.
El Institut Català de Finances (ICF) y Bankinter han financiado el proyecto a partes iguales con un préstamo de 2,3 millones de euros, gracias al cual LC Paper ha adquirido maquinaria industrial de última generación con un alto grado de automatización y digitalización, actualizando por completo su sección de procesamiento de fibra reciclada en La Garrotxa.
LC Paper fabrica papel a partir de la madera procedente de bosques gestionados, pero también a partir del reciclaje de otros materiales de papel y cartón. Históricamente, la industria papelera se había centrado en reaprovechar formatos de impresión, como documentación de empresas, libretas o diarios, entre otros ejemplos.
Sin embargo, fruto del proceso de digitalización, este tipo de residuos ha disminuido significativamente a la vez que han aparecido nuevos materiales asociados sobre todo al comercio electrónico, lo que supone un reto para la industria papelera.
"Reciclar una caja de cartón con errores de reciclaje y objetos metálicos y plásticos es mucho más complicado que reciclar documentación impresa. La inversión que hemos impulsado nos permitirá aumentar el porcentaje de productos fabricados a partir de materiales reciclados a la vez que reaprovecharemos residuos que de otra manera no se reutilizarían porque muchos otros fabricantes no disponen de la tecnología de selección necesaria", ha explicado Pau Vila, CEO de LC Paper.
"Gracias a la nueva maquinaria, podremos obtener una pasta de papel de elevada pureza y calidad en el producto final a partir de materia prima de bajas prestaciones, dado que tendremos capacidad para diferenciar y segregar elementos que no son papel y que acaban entrando en el circuito de reciclaje por error o por omisión del usuario final, pero también los elementos difícilmente separables", ha añadido.
Vila ha detallado que "mantener la calidad es especialmente importante cuando hablamos de formatos como el papel higiénico, donde el consumidor exige suavidad y grosor, o el papel para bolsas, donde el cliente quiere una elevada resistencia para que no se rompa".
La inversión, que se prevé que entre en funcionamiento en el segundo trimestre de 2025, también ha recibido una subvención de los fondos Next Generation de aproximadamente dos millones de euros para impulsar la circularidad industrial y la mejora de la sostenibilidad.
Una empresa líder en sostenibilidad con 143 años de historia
LC Paper es una empresa familiar fundada en 1881 encabezada por la quinta generación. La compañía dispone de tres centros productivos en las Comarques Gironines: la planta principal en Besalú/Beuda, dedicada a la fabricación de papel, y dos centros de manipulación de papel en Sarrià de Ter y Fornells de la Selva.
En total, cuenta con cerca de 150 profesionales en Catalunya. Con una facturación consolidada de 55 millones de euros (2023), la empresa exporta aproximadamente la mitad de su producción a 28 países de cuatro continentes diferentes.
Desde mediados de los años noventa, ha hecho una apuesta por la sostenibilidad con inversiones en el ámbito de la descarbonización energética, la reducción del consumo de agua y la eliminación de los envases plásticos, apostando por formatos reciclados y biodegradables. Por todas estas razones, ha sido el primer fabricante de papel del mundo reconocido con el prestigioso sello de excelencia en ESG "B Corp".