Frenar el dominio de Android. Es el objetivo de Cyanogen, una ‘startup’ estadounidense que desarrolla un sistema operativo para móviles basado en Android y Linux, pero con el objetivo de que sea una plataforma libre fuera del control que ejerce Google. Un grupo de poderosos inversores y multinacionales se han aliado en la cruzada por construir un sistema alternativo a Android (Google), iOS de Apple y Windows (Microsoft).
La compañía española Telefónica, a través de uno de sus fondos de capital riesgo, ha participado en una ronda de financiación de 80 millones de dólares para financiar a Cyanogen. La operación ha estado liderada por el fondo Premji Invest y en ella participa desde Rupert Murdoch (dueño de News Corp), Twitter Ventures, el fabricante de chips Qualcomm, el fondo Index Ventures o Access Industries, uno de los inversores de referencia de Rocket Internet.
La armada de inversores que están respaldando a Cyanogen incluye también, desde rondas anteriores, a Andreessen Horowitz o Tencent Holdings, el gigante chino de Internet. El objetivo de la ‘startup’ es crear una alternativa a Android, también basada en software libre, pero que escape al control del buscador sobre el ecosistema de aplicaciones del citado sistema operativo, mayoritario en todo el mundo.
Google activó en 2013 el dispositivo Android 1.000 millones y se ha colocado en posición de quasi-monopolio en el mercado móvil, con la única alternativa real de Apple con iOS y Windows de Microsoft. Los fabricantes de móviles como Samsung, LG o HTC han ayudado a construir un imperio en torno a Android, que depende al 100% de los desarrollos de Google y no tiene intención de compartirlo.
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