El sector del fitness sigue en pleno boom. La última operación ha venido de la mano de Viva Gym partipada por el fondo británico Bridges que ha comprado la portuguesa Fitness Hut creando el mayor operador en el segmento del bajo coste en España.
Este nuevo grupo suma unos 50 establecimientos y con la capacidad financiera del fondo detrás prevé poner en marcha un ambicioso plan de crecimiento. En este sentido, tiene previsto abrir una quincena de nuevos establecimientos a lo largo de este año, con el objetivo de acercarse al centenar en los próximos dos años.
En términos de ingresos, el grupo resultante de esta unión entre el mayor operador español y el mayor luso suma una cantidad cercana a los 50 millones de euros. Además, el nuevo grupo cuenta desde este momento con casi 200.000 socios en la Península Ibérica. Por el momento, las marcas funcionarán de forma independiente, aunque estarán coordinadas por el consejero delegado de Viva Gym, Juan del Río Nieto. El fondo estadounidense Ares Managment, especializado en el negocio de la deuda, ha prestado la financiación necesaria a Viva Gym para ejecutar la operación.
El boom del sector
La transacción llega en pleno auge del negocio de los gimnasios en España, que hasta hace poco estaba muy atomizado. Por ejemplo, tal y como adelantó elEconomista el pasado mes, el fondo español MCH está negociando su entrada en Altafit, hasta la fecha el mayor operador en el segmento del 'low cost' en el país. No obstante, casi todas las operaciones se han producido en un segmento más premium del mercado.
Hace escasos meses que el inversor Fernando Chinchurreta cerró la venta de los gimnasios Supera a sus excompañeros de Portobello Capital, que desembolsaron una cantidad cercana a los 180 millones de euros por sus establecimientos. También, Holmes Places (antigua participada de Alantra -N+1- y ahora en manos de los fundadores, la familia Fisher) compró el negocio de Virgin Active en España hace un par de meses. En 2016, Torreal (el brazo inversor de la familia Abelló) y Mutua Madrileña tomaron el control de Ingesport -la firma que opera la marca GoFit- por unos 250 millones de euros
Por Araceli Muñoz / Rubén Esteller / El Economista
Fuente de la info en castellano: El Economista
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