Un año después de ponerse en marcha, BHV Partners ya cuenta con varios proyectos en su venture builder – plataforma para la creación y crecimiento en cadena de start up – especializado en tecnología y ciencias de la vida. La compañía barcelonesa ha cerrado varios contratos de consultoría con empresas y centros de investigación y ha entrado en el capital de dos start up.
El proyecto, el primero de estas características en España, está liderado por varios profesionales con larga trayectoria en el sector biotecnológico: Marta Príncep, Joan Bigorra, Joaquim Trias y Albert G. Zamora. Además, la compañía, que cuenta también con oficinas en San Francisco (EEUU), hace gala de un amplio abanico de asesores para clientes y empresas en las que participa.
El propósito de un venture builder es construir proyectos empresariales sin los errores que cometen los emprendedores. “El principal problema que se encuentran los fondos de inversión es que difícilmente las empresas cumplen con todos sus requisitos: falla el equipo directivo, faltan determinadas pruebas científicas o se dirigen a un sector con demasiada competencia”, dice el socio fundador y presidente, Albert G. Zamora, cuya empresa ayuda a constituir start up con los requisitos adecuados del mercado.
BHV ofrece servicios de consultoría tanto a centros de investigación como a empresas del sector, desde análisis estratégicos a planes de negocio, pasando por scouting de start up o la gestión de transferencia tecnológica. La compañía acaba de cerrar un contrato con Reig Jofre y en su portafolio figuran como clientes el Institut de Bioenginyeria de Catalunya (IBEC), el Banc de Sang i Teixits y la Universidad de Santiago de Compostela. Además, cuenta con colaboraciones con IQS Tech Factory o la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
La socia fundadora y consejera delegada, Marta Príncep, explica que a lo largo de este año se verán los primeros proyectos empresariales constituidos en el seno de BHV Partners. “Tenemos tres iniciativas en marcha que en breve tendrán su puesta de largo: un dispositivo médico de la mano de un capital riesgo nacional, una empresa de servicios en el campo del turismo tecnológico, y otra de clínicas de medicina integrativa”, cuenta.
BHV Partners también entra en el accionariado de empresas ya constituidas que necesitan un reajuste. La compañía toma una participación a cambio del trabajo de sus profesionales.
Salud mental y ortopedia
El portafolio cuenta ya con dos empresas: Aimentia, una plataforma de inteligencia artificial especializada en salud mental, y Nela Biodynamics, start up especializada en el diseño y desarrollo de innovadores dispositivos para ortopedia y traumatología.
Además de los ingresos recurrentes que ha ido generando, BHV Partners se financia con aportaciones de inversores. Cuando se constituyó la empresa, abrió una ronda de 500.000 e hizo un primer cierre de 250.000 euros en diciembre. “Los inversores son principalmente directivos y empresarios del sector”, explica Zamora. Estos inversores cumplen una doble función, ya que también ejercen como asesores de las participadas y de los clientes. La compañía espera realizar un segundo cierre y completar la operación el próximo julio.
Por Gabriel Trindade / Expansión
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