La necesidad de innovar en servicios bancarios y mejorar la experiencia del usuario ha puesto de manifiesto que la colaboración, y no la competición, entre banca y ‘fintech’ es la tendencia para sobrevivir en el entorno digital. La apuesta de startups financieras por modelos de negocio B2B facilita en gran parte estas sinergias. En España, alrededor de un 75% de las fintech trabaja de forma colaborativa con bancos, mientras que un 50% de las entidades tradicionales mantiene algún acuerdo con empresas nativas digitales, según el Observatorio de Innovación y Tendencias Fintech 2018 de Finnovating. Estos datos están en línea con el promedio global en adopción fintech del sector bancario, que en 2017 creció un 54%, como apuntan desde la consultora EY.
Para una empresa de tecnología financiera (fintech), la banca suele ser su principal cliente y, a su vez, las entidades tradicionales ven las soluciones fintech como una herramienta de captación y fidelización de usuarios. "En el mercado español, los principales bancos están apostando cada vez más por disminuir sus activos fijos y sus costes de operación, a través de un incremento en la oferta de servicios online. Esto, sin duda, fortalece las relaciones con compañías nativas digitales y abre nuevas oportunidades de negocio para otros productos", señala Adriana Gaitán, Country Manager de FinReach.
Precisamente, desde FinReach, proveedor líder de soluciones y servicios digitales para la banca, con amplia actividad en Alemania, Austria y España, se pone en práctica un sistema de colaboraciones en distintos niveles en su día a día como ‘fintech’. Así, su relación con clientes como entidades bancarias, brókeres y organizaciones no financierasse establecen dentro de cuatro principales escenarios:
Estas oportunidades de colaboración pueden ser también complementadas con otras de carácter más informal, como sesiones de networking y de retroalimentación en eventos sobre el sector. A esto, la responsable de FinReach en España suma “la posibilidad de trabajar de manera activa con otras fintech, así como la necesidad de reforzar el contacto y ampliar los espacios de conversación con gobiernos y autoridades regulatorias” para abordar cualquier asunto relevante en la industria financiera.