En Metxa llevamos ya años acelerando startups, invirtiendo en ellas y ayudándoles en sus rondas de inversión. Por eso, creemos que es bueno visibilizar los 5 errores más habituales que se cometen a la hora de tratar de levantar una ronda:
Muchos emprendedores inician el proceso de búsqueda de inversión demasiado tarde. Un proceso de inversión lleva un mínimo de 6 meses, por lo que conviene tener caja para al menos 8 o 10 meses, antes de empezar los primeros contactos con los potenciales inversores.
Los inversores en general, y los profesionales en particular, ven cientos de proyectos al año. Sería una locura si tuvieran que formar NDAs de todos los proyectos que les llegan. Es más aconsejable pedirlo una vez que la negociación está más avanzada y le vas a dar acceso a tus datos más vulnerables.
Este es otro de los problemas habituales que encontramos. Hay que tratar de buscar el equilibrio entre una dilución moderada para el emprendedor y dejar recorrido suficiente de rentabilidad para el inversor de esta ronda y de rondas futuras.
No entender bien el papel del inversor. Los inversores, en muchas ocasiones, no quieren solamente buscar rentabilidad para su dinero. También suelen buscar involucrarse en el proyecto de alguna manera: advisory, mentorización, contactos, etc. Esto ocurre sobre todo en fase Seed.
No tener claros los KPIs de tu negocio. Es clave que los KPis que presentes al inversor hablen de la situación actual de tu negocio pero también de la evolución futura.
Hay más errores, los trataremos en otro artículo. Una última recomendación: mantén una relación fluida con la comunidad de inversores de tu zona (aceleradoras, fondos, redes de BA, etc). Aunque no estés en ronda, queda con ellos, cuéntales que tal te va, genera confianza. Esto te permitirá que a la hora de levantar una ronda, las pasos sean más rápidos.
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