La cotización de Ormonde Mining bajó ayer un 68% en la Bolsa de Londres tras anunciar un acuerdo para abandonar el capital de la mina de metales de Barruecopardo, en Salamanca, lo que deja al grupo irlandés sin su principal activo.
Oaktree Capital, fondo estadounidense que desde 2015 ya tiene el 70% del proyecto, ha pactado pagar 6 millones de euros por el 30% en manos de Ormonde, operación que deberá ser aprobada el mes que viene por los accionistas de esta empresa.
Según Ormonde, si la transacción es vetada, la sociedad española que posee la mina (Saloro) podría entrar en causa de insolvencia, según los contratos de financiación con Oaktree, que además de ser el primer accionista aporta buena parte de la deuda. En este escenario, una reestructuración llevaría a un canje de deuda por capital de Saloro que daría a Oaktree el control total. La mina tiene una deuda de 59 millones de euros.
El depósito español esconde reservas de wolframio, un metal de gran resistencia al calor utilizado en filamentos de bombillas y piezas de hornos y automóviles. La reciente caída de precios de esta materia prima, una menor producción de lo esperado en Barruecopardo y la necesidad de afrontar nuevas inversiones para mejorar sus operaciones explican la decisión de Ormonde de vender.
Mike Donoghue, presidente de la empresa irlandesa, señala que “aunque la venta de la participación puede ser una decepción para muchos accionistas, la mina se ha topado con significativos obstáculos durante el lanzamiento de sus operaciones, resultando inicialmente en un nuevo requerimiento de 10 millones de euros, cubierto con un crédito en octubre de 2019, y más recientemente con un nuevo requerimiento estimado por la compañía en unos 12-15 millones”.
Oaktree, grupo inversor californiano bien conocido en España porque fue accionista de Panrico y de Campofrío, deberá afrontar esas nuevas inversiones en solitario. Además de controlar Saloro, el fondo participa ahora en la empresa española Healthcare Activos, que invierte en hospitales, clínicas y asilos.
Tras la venta, Ormonde mantendrá inversiones en minas de oro en Salamanca y Zamora.
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