iF Lastmile tiene un objetivo muy claro: dotar a la compra online de la flexibilidad y atención personal de la compra física. Esto lo consigue equipando a marcas con un servicio de fulfillment capaz de hacer entregas y devoluciones en el día, en los 30 minutos que el cliente elija, y con una atención personalizada a la marca y su cliente en todo el proceso.

Trabajan con marcas de referencia como Northweek, Laura Vecino o Hemper y cuentan con el respaldo de una ronda de 1,5M€ de fondos como K Fund, Lanai y otros inversores de importantes empresas tecnológicas e industriales.

El equipo fundador viene de trabajar más de 10 años junto a grandes empresas del mundo retail y logístico a nivel Europeo en la implantación de centros de fulfillment. Su experiencia les ha demostrado que el 91% de los clientes no vuelven a comprar en una marca que falla en la entrega o que no tiene unos tiempos de entrega ágiles. Para ellos la clave para obtener fiabilidad y velocidad reside en el fulfillment. “Amazon cumple con esos tiempos en prime no por el carrier que use si no por que preparan pedidos mucho más rápido que cualquier almacén tradicional”, asegura Marcello, co-CEO de iF Lastmile.

El problema que ven es que hoy en día no hay soluciones que puedan cumplir estas dos premisas de manera económica y escalable para los ecommerce: “Hoy las marcas tienen la posibilidad de montar una tienda en minutos con Shopify pero no pueden contar con la potencia operativa de un gran retailer con un click. Ahí es donde estamos nosotros, resolviendo la pieza más compleja de la cadena a un precio asequible y sin costes fijos para la marca”

Su modelo consiste en partir en bloques la operativa de fulfillment tradicional: “Los almacenes grandes están bien para preparar cosas grandes pero para la preparación de pedidos ecommerce se generan estandarizaciones innecesarias que van en contra de la visión customer centric de un retailer. Nosotros operamos almacenes urbanos, casi como tiendas, con dedicación plena a la marca y sus clientes, en vez de un one-size fits all”.

Con su tecnología y red propia de almacenes distribuidos consiguen una fiabilidad, agilidad y personalización en la preparación superior a cualquier almacén. Las marcas obtienen un servicio prime combinado con una atención con línea directa y personal al almacén para cualquiera de sus canales.

Se conectan en menos de 30 min a cualquiera de las principales plataformas de ecommerce, como Shopify, Salesforce Commerce Cloud, Prestashop o Woocommerce, y permiten a la marca controlar el estado de sus envíos y niveles de stock en tiempo real.

La empresa ofrece servicios muy modulares, desde un fulfillment integral (desde el click a la entrega) hasta servicios de delivery desde una tienda física o devoluciones, adaptándose a marcas de diferentes tamaños y operativas.

iF Lastmile tienen presencia en las principales ciudades de la Península y cuenta con el apoyo de los principales carriers a nivel nacional y de una red de más de 500 riders.

En el corto plazo, la empresa se enfocará en consolidar su presencia en las principales ciudades de España y Portugal y extender su modelo de fulfillment a las más de 80.000 marcas que entregan aún en más de 24 horas. En los próximos 5 años, el plan pasa por ser el Shopify de la última milla y ofrecer un servicio flexible y adaptable a cualquier marca alrededor de Europa y América Latina

Fuente: K Fund

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