La Usal creará un fondo inversor para los emprendedores con el aval de la CNMV

La decidida apuesta de la Universidad de Salamanca por el universo emprendedor afronta nuevos desafíos, que orbitan ahora por la captación de fondos externos del tejido empresarial para materializar estos anhelados deseos. Como expresión de esta ambiciosa estrategia es el nuevo proyecto del equipo rectoral, en concreto del Vicerrectorado de Investigación y Transferencia que encabeza el catedrático JuanManuel Corchado, para constituir el primer fondo de emprendedores del entorno universitario de Castilla y León.

El nuevo fondo permitirá invertir en proyectos de investigación vinculados con las universidades de la Comunidad. De esta forma se dará cobertura económica a ideas emprendedoras desde sus fases más iniciales hasta que los mismas resulten viables. Se respaldará, en este sentido, proyectos con potencial innovador y que se encuentren en sus primeros estadios de desarrollo, vinculados tanto a la Usal como al resto de universidades de la región.

El documento para crear el nuevo fondo de inversiones para emprendedores ya ha superado los filtros de la maquinaria interna de la propia Universidad, una vez que el pasado 20 de noviembre fuera ratificado por la Comisión Permanente del Consejo de Gobierno de la Usal. En aquella sesión se dio autorización para la firma de un convenio de colaboración por el Vicerrectorado de Investigación con la sociedad gestora de entidades de capital riesgo Clave Mayor, con sede social en Pamplona y que, además, es la única gestora privada de estas características con oficina abierta en Castilla y León.

Más de 3.300 proyectos

Entre los objetivos prioritarios del nuevo fondo sobresalen el impulso a la actividad emprendedora en el entorno de las universidades castellano y leonesas, dotando de recursos financieros y asesoramiento a los proyectos surgidos en el ámbito académico. La novedosa propuesta quiere aprovechar la firme apuesta por la innovación desplegada en los últimos años por las universidades y la Junta de Castilla y León, aprovechando las infraestructuras creadas.

Clave Mayor, la sociedad gestora con la que va a trabajar codo a codo la Usal, atesora el análisis efectuado de más de 3.300 proyectos de inversión, de los que 1.500 corresponden a proyectos semilla, habiendo ejecutado desde el año 2002 un total de 51 inversiones, según se desglosa en los preliminares del convenio que suscribirá la institución docente.

Precisamente, la sociedad gestora que ha decidido sumarse a esta singular aventura deberá definir la fórmula jurídica del fondo, ya sea como capital riesgo de régimen común o simplificado. Clave Mayor se encargará también de solicitar la autorización pertinente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y constituir el fondo con las primeras aportaciones económicas. La Usal facilitará el contacto de personas o entidades ligadas a ella que puedan ser potenciales inversoras.

Entre las ventajas que obtendrá la Universidad mediante este fondo de emprendedores figuran, tal como se detalla en el documento, disponer de un instrumento que «puede aportar financiación para el desarrollo de los planes de negocio de empresas creadas en el entorno de la Universidad», al tiempo que evitará «consumuir recursos financieros» de ésta. El fondo contribuirá a generar «ingresos adicionales» a la institución académica por el empleo de infraestructuras y el cobro de royalties, además de incentivar la actividad investigadora de los departamentos.

El armazón que vertebra el proyecto contempla la captación de recursos para el fondo «principalmente entre inversores privados con vinculación a Castilla y León, tanto industriales, financieros, como oficinas familiares», aunque se buscará la posibilidad de obtener algún tipo de financiación del ámbito público, tanto a escala regional, como en las vertientes nacional y europea, tal como se concreta en el enriquecedor postulado de ideas que retrata el convenio de colaboración con la sociedad gestora navarra. También se abre la puerta a colaborar a exalumnos y centros tecnológicos universitarios.

Para los inversores que se comprometan económicamente, las bondades de la iniciativa podrán desembocar en proyectos con alta expectativa de rentabilidad, inversiones en condiciones más accesibles y modelos de negocio basados en factores diferenciales y tecnológicos.