Crece el volumen invertido por los fondos de capital riesgo en start ups españolas, compañías pequeñas en una etapa inicial y con proyección de crecimiento. Es un 52% más en 2014 comparado con el año anterior. Esto se traduce en 280 millones de euros.
Este aumento se posiciona como el tercer mejor registro histórico, apoyado fundamentalmente, en la actividad de los fondos internacionales, cuya participación en start ups españolas, ha empujado su inversión hasta alcanzar los 153 millones de euros, según los informe de la patronal Ascri.
Los fondos nacionales, con inversiones de 127 millones, mantuvieron sus niveles similares de inversión a los del año anterior, que fueron de 127,5 millones.
Actividad inversora
El interés creciente que están demostrando los fondos internacionales de capital riesgo por el mercado español, junto a la mejora de la captación de fondos por parte de los nacionales, apuntan a que la actividad inversora seguirá ganando peso en los próximos años.
Aunque estas firmas que invierten en start-ups, y que se conocen como venture capital, aportaron en volumen el 10% del total invertido por el conjunto del sector de capital riesgo en 2014, en conjunto 3.465 millones, el número de empresas por las que se ha apostado, representó el 77% sobre el total del sector. Si bien, el interés reciente por financiar stat ups maduras en rondas de inversión de mayor tamaño incrementó la media de inversión por empresa de 550.000 euros en 2013 a 894.000 euros en 2014.
Por otro lado, los fondos gestionados por firmas de venture capital privadas aportaron el 92% del volumen invertido. Además en los últimos años el papel de las entidades nacionales como financiadoras de pymes ha ido disminuyendo, ya que el número de entidades públicas orientadas al venture capital no ha variado en número y cuentan con menores presupuestos para la inversión
La inversión global en empress en primeras fases, start ups, está ganando peso paulatinamente y en los últimos años se está consolidando como un sector relevante dentro de la economía española. De hecho, en 2014, la inversión recibida por empresas españolas que se econtraban en estas primeras fases de desarrollo superó los 347 millones de euros, registro que supone un crecimiento del 26% frente al volumen alcanzado en 2013 de 275 millones.
Las entidades de venture capital destacaron al ser responsables del 81% sobre el total invertido en primeras fases. Las instituciones públicas contribuyeron con el 14% de la inversión.
En las primeras fases de crecimiento se cerraron un total de 1.057 inversiones, de las cuales 313 pertenecen a los fondos de venture capital. Son diferentes aspectos los que están empujando el desarrollo de este tipo de inversión, atraídos por la solidez alcanzada en numerosas start ups españolas. En 2014, de los 21 nuevos inversores internacionales de capital riesgo que comenzaron su actividad en el mercado español, 14 fueron de hecho venture capital.
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