Por Anna Cabanillas / La Vanguardia
En plena era digital la analítica se ha convertido en una herramienta esencial del marketing. Entre las necesidades: conocer en todo momento el tráfico de personas que, por ejemplo, consultan un producto o un servicio determinado en la red.
Para llevar esta idea al universo físico, un grupo de emprendedores barceloneses han desarrollado la empresa Counterest, herramienta que mide la afluencia de personas a distintos lugares como, por ejemplo, tiendas, museos o en el transporte público, para que las empresas puedan tomar decisiones en cuestiones de organización. “Utilizamos cámaras de tres dimensiones que identifican formas y volúmenes, pudiendo contabilizar grandes grupos de personas que, por ejemplo, entran en una tienda o en un museo.Toda esa información es subida a la nube para que ser analizada”, explica Oriol Tort, cofundador y director general.
No en vano, a los dos meses de crear Counterest –en octubre del 2013– la startup recibía la llamada del metro de Londres para instalar su solución en algunas de sus estaciones, como por ejemplo, London Bridge. “Les interesaba conocer cuántas personas se movían por los intercambiadores, pues allí los usuarios no marcan el billete, y saber qué líneas cogían, para posteriormente cruzar dichos datos con actos celebrados en la ciudad o con la meteorología, con el fin de prever comportamientos y adaptarse a las necesidades de los usuarios”, relata Tort.
Actualmente, la startup cuenta con clientes como La Pedrera de Barcelona, el BBVA, cadenas de moda, festivales de música o la Agència de Transport Metropolità, con la que trabaja en un proyecto piloto en los autobuses,que permita conocer en qué paradas sube y baja más gente. El 20% de los proyectos de Counterest están en el exterior, el Reino Unido, Italia, Holanda y Alemania, donde poseen una pequeña delegación. “La solución se puede adaptar a todo tipo de empresas; por ejemplo, a UniCredit le interesa saber cuándo funcionan mejor sus campañas, así como conocer en qué horarios necesitan más personas atendiendo la caja para distribuir de forma eficiente sus recursos humanos”, concluye el emprendedor.
Counterest, que emplea a 10 personas, se puso en marcha tras la inversión de 200.000 euros procedentes de inversores privados, un crédito ENISA y un préstamo de 30.000 euros que la startup obtuvo al ganar el concurso de emprendedores, Open Talent BBVA 2014
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