2018 fue un año especialmente dulce para Torreal. La sociedad patrimonial del empresario Juan Abelló y sus cuatro hijos ganó el año pasado 355 millones de euros, según figura en sus cuentas anuales. La cifra pulverizó los 18,68 millones que obtuvo en el ejercicio anterior y certifica la cifra de beneficios más alta en una década, gracias a dos operaciones: la venta de Imagina (el dueño de la productora Mediapro) y el gestor de parkings Saba.
Torreal selló en febrero del año pasado la venta del 22,5% que retenía en el dueño de Globomedia y fundador de La Sexta al gigante chino del capital riesgo Orient Hotai. También aprovecharon para vender su participación Televisa (19%) y Mediavideo (12%). La operación valoró la compañía en unos 1.900 millones, por lo que Abelló obtuvo en torno a 430 millones. Esta era una participación histórica en la cartera del empresario Juan Abelló, en la que estaba presente desde 2007, merced a la fusión entre Mediapro y Grupo Arbol, la productora de Emilio Aragon, en cuyo capital ya estaba presente.
Paralelamente, Criteria, con el dinero en el bolsillo obtenido en la opa de Abertis, decidió hacerse con la mitad del capital que no controlaba en Saba por 438 millones. KKR, Proa y Torreal, con un 20% por el que obtuvo unos 90 millones, se repartían un 49%. Otras desinversiones del grupo en 2018 fueron la venta de su negocio de opio, Alcaliber, al fondo británico GHO y la salida a Bolsa de Aston Martin, donde se desprendió de su 20% por más de 100 millones.
Torreal controlaba las participaciones en Imagina y Saba a través de su filial Torreal SCR, su gestora de fondos de capital riesgo. Esta sociedad repartió en 2018 un macrodividendo de 280 millones, precisamente gracias a los fondos obtenidos por ambas operaciones. Y ha sido este dividendo el que ha disparado el beneficio e impulsado la cifra de ventas hasta los 370 millones de euros, frente a los 54,87 millones que registró un año antes.
Junto al dividendo procedente de las ventas de Imagina y Saba, Torreal ha ingresado otros 60 millones en dividendos de otras filiales. También ha impactado positivamente a la cuenta de resultados las plusvalías registradas gracias a su participación en dos fondos de capital riesgo. Otra venta realizada en el ejercicio ha sido la de su participación en el banco italiano Banca Leonardo, por el que obtiene 7,3 millones de euros, que no podrá ingresar hasta 2021.
Estos 355 millones de beneficio marcan un hito en la historia de la compañía. Superan, con mucho, las ganancias en cualquier ejercicio de la última década y solo se le acercan los 104 millones que ganó en 2015. Pero se quedan lejos de las cifras de 2002, cuando ganó 662 millones gracias a la venta de Airtel a Vodafone. No obstante, permiten a la familia Abelló embolsarse un dividendo de 13,58 millones.
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