Tres vehículos españoles de capital riesgo han entrado en el portfolio del Fondo Europeo de Inversiones (FEI) en el último año. Se trata de los proyectos lanzados en 2017 por Portobello, Oquendo y Miura, que aparecen entre los casi 50 elegidos para obtener la inversión de la iniciativa europea y que contribuyen, por tanto, a reforzar su presencia en España.
Así consta en el reciente informe de actividad relativo al pasado año que ha divulgado el propio FEI, donde se especifican compromisos en estos tres fondos españoles por un importe total algo superior a los 165 millones de euros. Eso sí, no todos recibieron igual inyección del vehículo europeo participado por el Banco Europeo de Inversiones (BEI), la Comisión Europea y hasta 24 instituciones financieras de la región.
La asignación más elevada fue a parar al mayor fondo postcrisis de private equity del país, Portobello Fund IV, cerrado en 2017 después de captar 600 millones de euros. El proyecto de la gestora que dirigen Ramón Cerdeiras, Luis Peñarrocha, Juan Luis Ramírez e Íñigo Sánchez-Asiaín contará con un apoyo del FEI valorado en 80 millones. Esta cantidad es la segunda más grande que la iniciativa europea otorgó al año pasado, solo rebasada por los 100 millones que se invertirán en el italiano FSI Mid-Market Growth Equity Fund, uno de los vehículos con estrategia de crecimiento más relevantes del continente, con recursos por más de 1.200 millones.
Esta no es la primera vez que el FEI entra en un fondo de Portobello. En 2013 y 2014 la institución tomó sendas participaciones de 30 y 10 millones, respectivamente, en el predecesor de su nuevo vehículo, el Portobello Fund III, que finalmente recaudó 375 millones. Asimismo, en 2016 y a través de una operación de mercado secundario, la iniciativa europea invirtió otros 11 millones en ampliar posiciones en este fondo.
El tercer fondo de Oquendo, por su parte, ha percibido del FEI 55,3 millones, según recoge el informe anual de 2017 de la iniciativa europea. Esta cifra representa más de un cuarto de la bolsa total de 200 millones atraída para este vehículo. También en esta ocasión, el FEI es reincidente, ya que fue uno de los inversores del Oquendo Mezzanine II de 157 millones, para el que aprobó una aportación de 40 millones en 2012.
Además, el FEI confió en la entidad de Daniel Herrero y Alfonso Erhardt para realizar con ella varias coinversiones. En concreto, ha acompañado a Oquendo en las transacciones que la firma materializó en la empresa de estética y depilación láser Centros Único (2015) y en Terratest, la compañía de ingeniería geotécnica y cimentaciones especiales (2014).
Miura es la otra gestora española que ha sido seleccionada por el FEI en 2017. Y en esta apuesta, nuevamente, repite. El vehículo Miura Fund III, cerrado a finales de enero de 2018 en 330 millones, dispone de una inyección de 30 millones de la iniciativa europea, idéntico importe al que destinó al anterior fondo de la entidad que encabezan Luis Seguí y Juan Leach (Miura Fund II).
Portobello, Oquendo y Miura son las más recientes pero no las únicas gestoras españolas a las que el FEI ha insuflado oxígeno. Corpfin, Abac, Nazca, Realza o Espiga son algunas de las que integran este grupo. En los cinco últimos años, la iniciativa europea ha comprometido alrededor de 500 millones en vehículos españoles de capital riesgo, siempre según los datos de la entidad.
Por Mamen Ponce de León / Expansión
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